Piso modernista alto y soleado

Piso situado en una finca novecentista que data del año 1.897.

Se trata de un piso exterior esquinero situado en la cuarta planta de un edificio modernista. Está orientado al sur a la calle con sol de mediodía y tarde.

Cuenta con una superficie total de 74 m2 construidos.

Esta vivienda se vende totalmente reformada a estrenar, combinando todos los elementos originales modernistas que nos brinda como los suelos hidráulicos, cristales emplomados… con materiales e instalaciones nuevas de una alta calidad, con marcas reconocidas internacionalmente como Bosch, Grohe, Fujitsu…

Se propone una zona amplia de vida con comedor y cocina con dos salidas a dos balcones, una suite con baño y una segunda habitación.

Tercer piso pasante en chaflán

El edificio fue construido en 1897. El acceso al vestíbulo en planta baja se realiza por la calle Muntaner pero la parcela ocupa parte del chaflán.

Los chaflanes son uno de los elementos característicos del plan Cerdà que ordena urbanísticamente el barrio del Eixample. Ildefons Cerdà diseñó las esquinas de tal manera que separaba el cruce del tráfico rodado (hay que tener en cuenta que a finales del siglo XIX y principios del XX el tráfico era también de tracción animal) del punto de cruce de peatones, mejorando la seguridad y liberando un espacio en las esquinas. Por otra parte, la orientación de la trama urbana se establece de tal manera que el Sur coincide con la diagonal de las manzanas, consiguiendo así reducir la fachada orientada estrictamente a Norte. De la misma manera, en cada manzana, solo un chaflán tiene orientación Sur.

En este caso, la fachada de la vivienda da al chaflán Sur, con la orientación óptima en cuanto a luz y asoleamiento. Por otra parte, la calle es más ancha que las calles comunes del barrio. Las calles miden 20 metros de ancho y la calle  mide 30 metros. Esto se debe a que el ferrocarril pasaba originalmente por esta vía (en estos momentos el paso es subterráneo).

Por todo ello, tanto por orientación como por espacio, se trata de una fachada privilegiada.

También resulta singular que el edificio tiene la altura original, de planta baja, planta principal y cuatro plantas piso sin que se haya realizado ninguna remonta.

La distribución del piso concentra la zona de día junto a la fachada principal organizando en un espacio abierto la cocina, el comedor y el salón de la forma más diáfana posible para intentar que toda la zona participe de la luz y las vistas.

La zona de noche se sitúa en la parte posterior, dando al patio interior y al patio de manzana. El piso dispone de un dormitorio principal con baño y zona de vestidor y un segundo dormitorio. Desde la zona de estar se accede a un segundo cuarto de baño. De la misma manera, se diseñan los tabiques con una franja alta de vidrio para intentar que la luz llegue a todos los espacios.