Las paredes del edificio contienen múltiples e increibles historias todas ellas con la figura de Salvador Dalí como denominador común. El surrealismo se respira en todos los rincones, y cada espacio nos cuenta historias que el genial artista y pensador vivió con las celebrities y personalidades del momento.
La pista forestal que cruza la marea de viñedos nos conduce a la zona del parking de la finca.

La construcción se divide en dos partes anexadas. Una imponente torre destaca en la parte principal de la edificación. En la base de la torre encontramos diferentes espacios interiores y exteriores diáfanos, así como una amplia recepción con piscina cubierta. Toda esta zona está totalmente preparada y equipada para la realización de diferentes tipos de eventos.

A continuación encontramos una ala en planta baja en la que se ubica una preciosa vivienda con grandes ventanales en la parte frontal des de dónde se accede a la tranquila terraza, un lugar idóneo para relajarse y contemplar las maravillosas vistas al Golfo de Rosas y el Massis del Montgrí.

La finca dispone de todos los permisos para la realización de eventos musicales, celebraciones de todo tipo de eventos, bodas, congresos de empresas, etc... También dispone de licencia para actividades de turismo rural y restauración.
Un solo instante en esta propiedad es suficiente para entender porqué Dalí escogía este lugar para pasar un buen rato con las personalidades y celebrities de la época que venían a visitarle. Una propiedad en la que se han escrito mil historias y la cuál está lista para que se escriba otra de nueva.